Generar recursos haciendo buenas inversiones y aprovechando al máximo los distintos instrumentos financieros que ofrece la economía es una meta que todos deberían programarse. Para alcanzar este objetivo, solo hay que tener en cuenta algunas claves básicas de educación financiera que si se aplican como debe ser,  el plan se hace más sencillo.

Aprovechar mejor los recursos que se tienen y generar ingresos adicionales más allá de los obtenidos del trabajo, es algo que se puede lograr fácilmente si se siguen ciertas claves de la educación financiera, tal como lo indican estudios recientes realizados por el comprador de préstamos en España, Wannacash. 

Al respecto, es importante saber cómo aplicar esas reglas y cómo sacarle el máximo provecho a los conocimientos y habilidades que en esa área se pueden tener. Quienes utilizan sus destrezas y conocimientos en educación financiera, para lo cual no hay que ser un erudito en la materia, generalmente logran obtener recursos extra que les permiten tener mayor libertad financiera.

¿Qué es la educación financiera?

La educación financiera no es un concepto que esté relacionado con la formación  académica universitaria, nada de eso. Está vinculado a la capacidad que se pueda tener para comprender fórmulas y estrategias orientadas a obtener recursos adicionales que no provengan del trabajo y que ayuden a aprovechar mejor lo que ya se tiene. 

Es una formación que se obtiene de manera personal, de forma autodidacta, a través de la búsqueda constante de información y de las experiencias vividas. Mientras más se aprenda más posibilidades se tienen de utilizar mejor los recursos y obtener ganancias seguras y estables.

Es la manera como se entiende el dinero en el mundo, cómo se gana, cómo se invierte, cómo se administra y hasta cómo se pierde. Al comprender cómo funciona todo, se puede actuar de manera más efectiva y lograr tener una mejor estabilidad financiera.

Claves de educación financiera

Para entender mejor el funcionamiento del dinero y de cómo sacarle el máximo provecho a los conocimientos adquiridos se deben aplicar unas reglas fundamentales que rigen todo mecanismo de la educación financiera.

Básicamente, las claves de la educación financiera son tres: la información, la formación y el ahorro. Sobre este trinomio se fundamentan toda regla o lección básica:

Gasta menos de lo que recibes: si así lo haces podrás tener una vida cómoda, sin deudas y sin estrés.

Leer libros sobre educación financiera: la formación constante es fundamental para poder aprender a gestionar el dinero.

Fijar metas y establecer costes financieros: al establecer objetivos y calcular cuánto saldrá obtenerlos y mantenerlos se clarifican mejor las metas y se convierten en números que dependiendo del plan que se trace se vuelven realizables o no.

No depender del trabajo: puede sonar absurdo, pero la meta debe ser siempre tener recursos no dependientes de la nómina ordinaria. Deben buscarse distintas fuentes de ingreso para que en caso de pérdida del empleo esto no genere gran impacto en la economía.

Una manera efectiva de lograr ingresos extra es solicitar un préstamo online para invertirlo en algún negocio que pueda rendir dividendos suficientes para pagar el crédito y seguir avanzando.

Los créditos online son fáciles de pedir y los aprueban muy fácil, sin necesidad de hacer tantos trámites ni de presentar complicados requisitos. Son una opción muy práctica para obtener recursos que puedes utilizar en muchas cosas; además, son muy cómodos de pagar.

No te dejes engañar por el “dinero fácil”: avisos y ofertas que prometen ganar dinero sin mucho esfuerzo de un día para otro, solo invirtiendo determinadas cantidades de dinero, generalmente son estafas. No caigas en ellas.

Evitar la ilusión monetaria: al ganar más se debe evitar la ilusión de que se puede gastar más. Lo ideal es mantener el mismo ritmo de vida y utilizar los recursos extra en otras inversiones que puedan seguir generando utilidades, que luego al aumentar los ingresos se puede mejorar progresivamente el nivel de vida.

Entender la relación riesgo / rentabilidad: para ganar más hay que arriesgar más, es una ley financiera que aplica a todos los niveles. Por lo tanto, hay que entender que se debe  arriesgar y estar dispuesto a perder si fuera el caso, es la única forma de obtener buenos beneficios.