La ilusión de llegar a un nuevo hogar y decorarlo a nuestro antojo suele ir acompañada de un caos de cajas, maletas y bolsas, además de una considerable cuota de estrés y agotamiento. Las mudanzas no son un proceso sencillo, pero tampoco es imposible superarlas con éxito, ya que una buena planificación puede resultar en grandes diferencias.
En primer lugar, considera contratar un servicio profesional de alquiler furgonetas mudanzas, el cual puede encargarse de una gran cantidad de detalles y asegurar que cada uno de tus muebles llegue al nuevo destino en perfectas condiciones. Organizar cada etapa, antes, durante y después de la mudanza, te ayudará a completar el proceso con éxito.
A continuación, te ofrecemos cinco consejos cruciales para que la mudanza a tu nuevo hogar ocurra de una forma exitosa, con la menor cantidad de estrés posible. Te aseguramos que con estas recomendaciones podrás prevenir los contratiempos habituales que suelen presentarse en medio de esta transición tan importante para la vida familiar.
Contenido
Define bien cuál será el día de la mudanza
En primer lugar, es imprescindible que definas con suficiente antelación cuál será el día para ejecutar la mudanza. Esto te permitirá un mayor margen de negociación con las empresas de transporte especial, puesto que usualmente las fechas cercanas y los viajes de emergencia suelen tener un precio superior a los viajes planificados con semanas o meses de anticipación.
Limpia, organiza y deshazte de todo lo innecesario
La mudanza resulta el momento ideal para deshacerte de todos esos objetos que tienes guardados sin utilidad alguna. Puedes realizar una limpieza profunda, recoger lo que no necesitas y comenzar a vender, donar o tirar todo aquello que se encuentra dañado y sin posibilidad de reparación. Esta tarea te ayudará a liberar espacio en el camión y concentrarte en los bienes que sí tienen valor.
Comienza a empaquetar
Lo primero que debes comenzar a empaquetar es todo aquello que no se utiliza en casa de forma cotidiana, como los cuadros, piezas decorativas y artículos frágiles como vajillas o cristalería. Organiza las cajas, rotula cada una de ellas indicando el contenido y realiza un inventario a medida que vayas guardando los objetos. Esto hará más simple el proceso de desempaquetar todos tus bienes una vez hayas llegado a tu nuevo hogar.
Pide ayuda
Si no tienes una familia numerosa, lo mejor será pedir ayuda a tus amigos. El proceso de embalaje puede resultar agotador para una sola persona, así que es bueno que toda la familia se involucre en el mismo, incluso se puede solicitar a otros familiares y amigos un poco de ayuda si es posible. Por supuesto, tendrás que asegurarte de que trabajen bajo tu supervisión para evitar equivocaciones.
Viaje y desembalaje
Para terminar, recibiremos las cajas y muebles en el nuevo hogar. Dependiendo de la duración del viaje, podremos descansar un poco antes de que la mudanza llegue a su destino y podamos comenzar el proceso de desembalaje. En esta fase no es bueno apresurarse, lo ideal será ir desembalando poco a poco e ir organizándolo todo en simultáneo para no crear un caos en el nuevo hogar.