Montar en bicicleta es una de las actividades físicas más completas que existe, con el potencial de ayudar en la prevención de diversas enfermedades. Si estás leyendo estas líneas, es probable que lo hagas porque tienes la inquietud de participar en el maravilloso mundo del ciclismo y deseas conocer más sobre los beneficios físicos, mentales y emocionales ofrecidos por la actividad.

Para practicar ciclismo en la ciudad o simplemente desplazarte en este medio de transporte sostenible, necesitarás un equipamiento esencial que incluye, por supuesto, una bicicleta y algunos accesorios de seguridad.

En el sector de la movilidad sostenible y el ciclismo, existen empresas con modelos de negocio novedosos como el de Kleta, una empresa que ofrece una bici eléctrica bajo modelo de suscripción, la cual se puede utilizar todo el día a través de una tarifa mensual e incluye un mantenimiento completo e ilimitado, sistema antirobo y flexibilidad total.

¿Cuáles son los beneficios de montar bicicleta?

Siendo una actividad física completa, su práctica deriva en importantes beneficios para nuestra salud, tanto a nivel físico como mental. Si ya tienes una bici en Sevilla, Barcelona o cualquier otra ciudad, entonces te conviene conocer el conjunto de beneficios que se obtienen al montar en bicicleta todos los días como parte de la rutina cotidiana.

Reduce la probabilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares

Andar en bicicleta 20 kilómetros cada día como parte de la rutina diaria representaría una reducción del riesgo a desarrollar enfermedades cardiovasculares tales como paros cardiacos, hipertensión y derrames cerebrales, entre otras. Esto ocurre debido a que se trata de una actividad dinámica, con gran exigencia a nivel respiratorio.

Ayuda a quemar calorías y bajar de peso

Montar en bici es un factor que contribuye con la pérdida de peso y el gasto calórico. Pedalear durante 30 minutos a ritmo tranquilo, en terreno plano, representa un gasto energético de 100 calorías. Por tanto, se convierte en una actividad capaz de ayudar a prevenir el desarrollo de la obesidad y a facilitar la pérdida de peso en quienes ya padecen sobrepeso.

Fortalece el sistema inmunitario

Al realizar actividades físicas demandantes como andar en bicicleta, el organismo produce fagocitos, un tipo de células que captura y digiere microorganismos como bacterias, haciendo que sea menos probable que nos enfermemos a causa de ellos. Junto a una buena alimentación, ir en bici del trabajo a la casa puede mejorar el funcionamiento de nuestro sistema inmune.

Tonifica la musculatura

Se trata de un tipo de ejercicio físico que involucra casi todos los grupos musculares, tonificando y fortaleciendo glúteos, cuádriceps, isquiotibiales y los músculos de la zona lumbar. Por tanto, ser constante recorriendo la ciudad en bici puede significar una mejora general evidente en la tonicidad muscular.

Reduce el estrés

Montar bici también es una actividad divertida y estimulante, con la capacidad de mejorar nuestro estado de ánimo y reducir el estrés asociado a la rutina cotidiana. Se trata de un ejercicio ideal para generar dopamina y endorfinas, dos hormonas que inducen sensación de bienestar, ayudan a reducir los niveles de estrés, ansiedad y controlar episodios leves de depresión.

Mejora la atención

Nuestra capacidad de concentración también tendrá una mejora significativa al incluir el ciclismo en nuestra rutina habitual. Andar en bici estimula áreas del cerebro que son necesarias para ejercer la coordinación y equilibrio durante el movimiento constante, mismas áreas involucradas en la concentración y la atención.